Si atendemos seria y muy responsablemente en nuestras familias, ciudades y naciones el llamado de Dios a la oración, al ayuno y a la consagración de Su Pueblo en el mes de JULIO; ese mes séptimo, podría cambiar drásticamente el presente y el destino futuro de nuestra Sociedad. Por eso es necesario que conozcas bien este llamado del Cielo.
Mientras me preparaba para la Apertura de nuestra XXX Conferencia Internacional en Costa Rica el pasado martes 14 de Mayo, tuvo un experiencia espiritual súbita e inusual. Me quedé dormido fracciones de tiempo, pero lo suficiente para tener un sueño muy interesante:
Me vi en la plataforma del Evento declarando lo siguiente de parte de Dios:
«Julio, mes siete
mes de plenitud,
mes de las resoluciones divinas».
Al terminar de proclamar esto, el Señor me indicaba que profetizara:
– Serán 31 días de Adoración
– Serán 31 días de Oración
– Serán 4 sábados para convocar ayunos
– Serán 4 viernes para convocar vigilias de clamor
– Serán un mes de humillación ante el Altísimo
Es un llamado urgente para tu país Costa Rica y para todas las naciones que quieran asumir el desafío por su tierra y por su gente.
Finalmente el Altísimo añadió:
«Julio será un mes para desatar las respuestas divinas para las peticiones de mi pueblo»
Ministros de RAMCU, Ministros de otras Redes Ministeriales:
La invitación está hecha
Unámonos en clamor ferviente al eterno por la transformación de nuestros países y ciudades en el próximo mes de julio, 2019.
¡Amén y Amén!
